sábado, 31 de mayo de 2014

COMIENZO

hoy iba a suicidarme, estaba cansado de esta vida seca y vacía; aunque tenia dinero a montones y el reconocimiento que cualquier medico quisiera, sabia que solo eran una pantalla para lo que realmente estaba haciendo; cubrir a unos pusilánimes dirigentes que tenían este país vuelto mierda. Todos los días llegaban a mi consultorio historias de sus horrendos y despreciables actos, que solo yo y mi secretaria deberíamos saber; tal era el caso de un respetable senador, el cual se jactaba de ser un abanderado de buenas costumbres en su tierra; para que yo le curara una infección en el ano debido a una noche desenfrenada de sexo homosexual; o de la respetable ministra que estaba en contra de la dosis personal, drogada hasta el punto de haberle hecho reanimación dos veces; para que luego a la noche siguiente, volviera a sus andanzas de vicio y trago en la costa.

Así eran todos los días de mi vida, viendo la real cara de la oligarquía y los poderosos en este país; gente despreciable que merecía la muerte mas que cualquier delincuente; pues sus actos quedaban en la impunidad total; y sus victimas eran condenadas a la muerte o al exilio, como si el dinero de sus arcas llenara la rabia de las pobres personas a quienes victimizaban. A veces pensaba en tomar la justicia en mis propias manos; pero el temor y mi ética, aunque en el piso, no me lo permitían; pero a veces la justicia divina actúa de formas insospechadas; como esa vez que vino un Alcalde que había violado a dos niñas; pero que una después del despreciable acto, no se si premeditado o no; le había mordido el miembro hasta amputárselo; dejando un pellejo de carne; me rogaba el maldito que lo curara, que donde quedaba su imagen de político correcto, pero lo único que pude hacerle fue un implante; el cual era inservible para sus depravados actos, lo ultimo que supe de el fue que se pego un tiro en la cabeza  después de matar a su esposa, que los políticos de turno hicieron pasar como un atentado para subir en las encuestas.

Ya tenia decidido como me iba a matar, lanzándome de la ventana del consultorio, pero antes tenia que eliminar toda la información que tenia archivada, pues esos malditos podían desquitarse de mi hija, que era lo único que tenia; que aunque me odiaba y juro no volverme a ver, mantenía y cuidaba en su apartamento en París.

Justo en ese momento que estaba eliminando mis archivos; mi secretaria me llamo al datáfono, se le escuchaba algo asustada, lo que me inquieto un poco:
- Doctor, el ex presidente lo busca, lo traen los escoltas; que lo necesita urgente
- Dígale que estoy ocupado, que mas tarde paso por su casa.
- No doctor, lo traen alzado y esta muy delicado, tiene una fiebre altísima.

Tuve que salir a ver que sucedía, fue cuando lo vi; odiaba a este sujeto terriblemente, sabia de sus andanzas con las drogas, las cuales eran facilitadas descaradamente por sus amigos en la selva, lo cual lo ponían de in carácter irascible y violento; ademas sus facciones y su cuerpo voluminoso en ese estado generaban asco por donde pasaba, también suponía a que venia; era un pedo filo descarado, teniendo esclavo  sexuales de todos lo países del mundo, que coleccionaba como si fueran caballos de paso.

El maldito estaba inconsciente, asi que le pregunte a uno de sus escoltas que le había pasado.

- No Doctor, el presidente estaba con uno de sus niños, uno nuevo que había traído de Asia, cuando el niño entro en un estado de ira que no entendíamos, el mocosito le había mordido la pierna al presidente; y este cegado de la ira le pego un tiro en la cabeza; ya después no supimos nada mas.
- y cuando empezaron a aparecer los síntomas
-A los diez minutos, el presidente entro en convulsiones y tenia una fiebre altisima, ademas la herida no le queria sanar ; tuvimos que traerlo acá pues empezó a delirar y usted sabe como es el en ese estado
- Páselo a mi consultorio, voy a examinarlo a ver que sucede.

Cuando lo vi, la verdad me inquieto bastante, aunque su temperatura era muy alta, no generaba ningún tipo de sudor; vi la herida, y lo mas extraño era el liquido viscoso que emanaba, el cual producía un olor de podredumbre terrible, ademas la infección ya había llegado a la sangre y al hueso, lo que me inquieto aun mas; pues ninguna enfermedad que yo hubiera conocido o estudiado había actuado tan rápido.

Mientras lo curaba, el maldito entro en shock y murió, su cuerpo empezaba a heder mas de lo normal en esos casos, pero mi miedo al saber el problema que tenia en mis manos no me dejaba razonar tranquilo; como iba a explicar la muerte de este imbécil, sus amigos me iban a caer con toda; aunque no temía a mi muerte, mi preocupación era mi hija; eran capaces de ponerle una bomba en su departamento, solo para que yo escarmentara sobre mi error.

Llame a los escoltas y les di la noticia, ellos estaban mas asustados que yo; pero ya resignados , me dijeron que ellos ya se iban a encargar de la situación. Salí del consultorio y me fui a mi oficina, realmente estaba asustado, me aterraba las consecuencias de este suceso, las consecuencias que iba a acarrear esto sobre mi hija, todo esto nublaba mi mente; cuando empece a  escuchar los disparos.

Me tire al suelo debajo de mi escritorio, cuando escuche los gritos de mi secretaria y  de los escoltas, eran aterradores; no tenia ni idea de lo que estaba pasando; hasta que escuche un gruñido desconocido en ese momento, escuchaba mas disparos, pero a lo ultimo escuchaba lo que a mi parecer era como una bestia mascando una especie de comida gruesa, de una forma que podía escuchar como despedazaba lo que engullía de una manera que me aterro.

No se como,pero me arme de valor y me fui al consultorio, pero la verdad no estaba listo para lo que estaba a punto de ver; el cuerpo del ex presidente había adquirido vida propia, de su vientre salían como una especie de garras largas de color negro, y en el centro de las mismas; se había generado una boca, la cual engullía los pedazos que asumí eran los escoltas y mi secretaria, su cuerpo asumió un color  verde pastoso y su cabeza solo rugía como una bestia incontrolable.

Este ser no había notado mi presencia, pues estaba despedazando lo que quedaba de mi secretaria, no me lo explico todavía  como sucedió, pero vi una ametralladora ensangrentada en el suelo, la recogí y comenze a dispararle, la bestia trato de atacarme, pero uno de los disparos despedazo su cabeza, y cayo al suelo en un mar de pus y sangre verde, para luego quedar inmóvil en la mas increíble tranquilidad, como si aquel ser hubiera caído en un profundo sueño.

Hasta el día de hoy no me explico porque actué así, siempre había sido un mediocre;temiendo hasta por el mas insignificante peligro;pero hoy había actuado con la valentía que no tuve en toda mi vida.  Pero si hubiera sabido que me iba pasar mas adelante; me hubiera tirado de la ventana a la muerte....

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